Extremadamente bella y altiva, esta joven mujer dejo embelesado al pintor jalisciense cuando la conoció en una visita que hizo al Estado de Tlaxcala.
Jorge González Camarena asistió a un bar donde generalmente se reunían pintores e intelectuales de la época.
Victoria Dorantes Sosa (como dice en su acta de nacimiento) trabajaba como mesera en ese lugar; al verla, Jorge González Camarena la abordó y le propuso que fuera su modelo.
Victoria, de sólo 18 años, le dijo “¡Olvídese! Estoy casada con un guardaespaldas de una figura política del Estado de Hidalgo, y es un hombre muy violento. Si mi marido se entera que soy su modelo, al día siguiente hay dos entierros”.
Pero González Camarena estaba obsesionado con Victoria y no dejó de insistir para convencerla de que fuera su modelo
Empezó a vigilar a la joven cuando entraba y salía de su casa, y un día vio que había un velorio. Lo primero que imagino fue que el guarura había matado a su musa. Pero no, el difunto era el marido, que había muerto en una balacera.
El pintor, muy respetuoso, esperó a que pasaran los cuarenta días de luto, el cual era riguroso en Tlaxco, Estado de Tlaxcala, de donde ella era originaria.
Así pudo convencer a la feliz viuda de que fuera su modelo La belleza de Dorantes se convirtió en una obsesión del artista, quien la pintó y dibujó frenéticamente en óleos, tintas, bocetos, retratos, murales, proyectos y carteles que se convirtieron en temas del muralista oficial y propaganda gubernamental durante los sexenios de diferentes presidentes.
Victoria Dorantes Sosa fue inmortalizada en una obra en óleo sobre tela de 1.20 x 1.60 metros; de ahí, su imagen pasó a ser reproducida en más de 400 millones de libros de texto gratuito de 1962 a 1972, y fue retomada nuevamente en el gobierno del presidente Ernesto Zedillo para volver a imprimirse en los libros de primaria.
El escritor tlaxcalteca Willebaldo Herrera Téllez recordó que Victoria Dorantes representa un icono cívico en el imaginario colectivo desde la década de los años sesenta.
Se dice que Jorge González Camarena y Victoria Dorantes vivieron un fuerte romance durante varios años, pero en algún momento de la historia terminaron la relación y nunca se supo mucho de la atractiva joven indígena.
Profa.: Mayra Núñez
